Justificaciones de un atraco

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Hola.

Según el artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como el artículo 1 de la Ley Federal de Radio y Televisión, el espacio radioeléctrico es propiedad de la Nación. O bueno, eso en el papel, porque en la realidad es que éste se lo regalan a quienes le han hecho favores a los gobiernos en turno.

Ésta historia es tan vieja como la historia de las telecomunicaciones en México. Así pues, nos encontramos con hechos como que, durante la última parte del sexenio de Miguel Alemán Valdéz, éste le entrega una de las concesiones para explotar las frecuencias de televisión en los 50’s a Emilio Azcárraga Vidaurreta, la del Canal 2, que salió al aire en 1951. La asociación que se da entre los canales 2, 4  y 5 en 1955 y que da origen a Telesistema Mexicano, no es lo importante aquí. Lo importante es que, curiosamente, años después, Miguel Alemán Velazco (su hijo) fue uno de los principales accionistas de Televisa, al que tanto su padre como Ruiz Cortines (y en general, todos los Presidentes) agasajaron tanto.

Así pues, en el siglo XXI, con un gobierno y un presidente espurio, ahora tenemos que siguen entregando el espacio radioeléctrico a los mismos beneficiarios de siempre. Ahora, tocó a las bandas de frecuencias de 1850-1910 Mhz. y 1930-1990 Mhz. (Licitación 20), y las bandas de 1710-1770 Mhz. y 2110-2170 Mhz. (Licitación 21), las cuales la COFETEL regaló a los mismos de siempre. ¿Para qué son éstas frecuencias? Pues bien, son frecuencias para el envío y recepción de telefonía celular, y es por donde se trasporta todo cuanto tiene que ver con éste jugoso negocio.

Para realizar la rifa del espacio “licitado”, dividieron las bandas en segmentos de 5 Mhz., los cuales eran asignados por pares, es decir, uno de la frecuencia baja, y otro de la frecuencia alta, de tal forma que fueron asignadas en partes no proporcionales a los ganadores. Para que se entienda mejor: supongamos que Televisa ganaba un segmento de 10 Mhz., entonces le asignaban el segmento entre 1900 y 1905 Mhz., y el de 1980 y 1985 Mhz., sumando así sus 10 Mhz. Y así, respectivamente, entre los afortunados, hasta que cubrieron todas las señales a asignar.

La Licitación 20 se la regalaron a tres:

  • Telecomunicaciones del Golfo, S.A. de C.V., subsidiaria de Iusacell, integrante de Grupo Salinas, y cuyo dueño es Ricardo Salinas Pliego, con el 2.2% de la participación de ésta licitación, obtuvieron 9 segmentos de 10 Mhz.
  • “Grupo de Inversonistas conformado por las empresas Comunicaciones Nextel de México, S.A. de C.V. (Televisa), Inversiones Nextel de México, S.A. de C.V.(más Televisa), y Televisa, S.A. de C.V. (y por si fuera poco… Televisa)“, con el 1.62% de la licitación y 1 segmento de 10 Mhz., y
  • Pegaso Comunicaciones y Sistemas, S.A. de C.V., que es la razón social en México de Movistar, empresa española de telecomunicaciones, y que en ésta licitación tuvo el 96.18% de la participación y que obtuvieron 14 segmentos de 10 Mhz.

Por su parte, la Licitación 21 también fue rifada entre 3, quedando de la siguiente forma:

  • Radiomóvil DIPSA, S.A. de C.V., razón social de Telcel, y cuyo dueño es Carlos Slim, con el 72.29% de la participación de ésta licitación, obtuvieron 21 segmentos de 10 Mhz.
  • Pegaso Comunicaciones y Sistemas, S.A. de C.V., que es la razón social en México de Movistar, empresa española de telecomunicaciones, y que en ésta licitación tuvo el 24.27% de la participación y que obtuvieron 6 segmentos de 10 Mhz., y
  • “Grupo de Inversonistas conformado por las empresas Comunicaciones Nextel de México, S.A. de C.V. (Televisa), Inversiones Nextel de México, S.A. de C.V.(más Televisa), y Televisa, S.A. de C.V. (y por si fuera poco… Televisa)“, con el 3.44% de la licitación y 1 segmento de 10 Mhz.
  • 30 Mhz. quedaron sin asignar (declararon desierta la licitación)

Es decir, al final, los ganadores fueron 4, asignados de la siguiente forma:

  • Telcel, con 50.3% de la participación de ambas licitaciones, y 21 segmentos de 10 Mhz.
  • Movistar, con el 46.12% de la participación en ambas licitaciones, y 20 segmentos de 10 Mhz.
  • Televisa/Nextel, con el 2.78% de la participación, y 2 segmentos de 10 Mhz.
  • TV Azteca/Iusacell, con el 0.8% de la participación, y 9 segmentos de 10 Mhz.

De aquí podemos desprender otro análisis: ni todos los segmentos valieron lo mismo, ni a todos se les permitió participar por igual. Y aquí no defendemos a TV Azteca, Televisa, Movistar o Telcel. Hablamos de todos, incluyendo a los que quedaron fuera de las licitaciones.

Lo curioso de todo ésto es que Televisa sale a defender a la COFETEL. Es decir, salen a sus espacios informativos justificando las licitaciones, cuando es verdad que los dados estaban cargados hacia éstas cuatro empresas. En el caso de la Licitación 20, dejaron fuera a empresas como Axtel, Avantel, MVS, Alcatel y Maxcom, pues más de la mitad de las otras empresas eran subsidiarias de Televisa, TV Azteca, Movistar o Telcel. En el caso de la Licitación 21, aparte de las ya mencionadas, dejaron fuera a empresas como Motorola, Marcatel.com y NEC.

Es decir, cerraron nuevamente el negocio de la telefonía celular, y se la volvieron a entregar a los de siempre. Es por eso por lo que han habido tantos cuestionamientos en que la COFETEL dirigió éstas licitaciones, y cómo siguen sirviéndole con la cuchara grande a los que continúan acumulando la riqueza y hacen crecer la brecha entre ricos y pobres.

En éste sentido, habría que valorar el papel que ha tenido la COFETEL en éstos casos, y también habría que regular el esquema normativo en que se mueve, puesto que no podemos confiar en un órgano de ésta naturaleza sin restringirlo en ciertas cuestiones, como la ingerencia de los grandes consorcios en sus decisiones.

Tendría que hacerse una Ley de Telecomunicaciones integral, que abarque radio, TV y nuevas tecnologías, pero que no sea redactada en las rodillas ni en las oficinas de Chapultepec 18. Hasta ese momento, mientras tanto, veremos cómo se reparten el pastel entre unos cuantos, y cómo (además) cuenta con la complicidad oficial, como en tantos otros casos, tanto del rubro de las comunicaciones, como en general.

Saludos. Dejen comentarios.

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